Entre sábanas blancas, siluetas de cuerpos humanos, rostros plasmados en almohadas, en una habitación de un hostal, con un ambiente de sigilo sacramental, se presenta la obra artística Sudarios, con la que se busca hacer consciencia sobre las y los desaparecidos en Hidalgo, en México, así como por los años de búsqueda por parte de sus familiares y el cuestionar, ¿Dónde están esas personas, sus cuerpos?.
Esta es la propuesta del artista Juan Carlos Franco, egresado de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), quien señala que esta es una idea del Museo de Arte Contemporáneo que ideó esta intervención en una habitación Casa Viajero, en Pachuca, que lo presenta en un cuarto de este lugar.
“Se trata de hacer llevar al espectador a que viva y conviva, durante el tiempo que alquile la habitación, con este cuestionamiento, en este encuentro con el arte de forma vivencial, es ser parte de la obra, porque Sudarios es una analogía entre el papel como soporte artístico con las sábanas, mortajas o sudarios que envuelven los cuerpos de los muertos.
Me basé a partir de los elementos como las manchas, improntas y el pliegue para preguntar, dónde está el cuerpo y es por eso que hago uso de la imagen índice de los rasgos, huellas que puedo dejar sobre el papel para contar con la historia que, a su vez, tiene que ver con el cuerpo, porque mi pregunta es… ¿Dónde están?”, indica.
Señaló que en México hay muchos cuestionamientos sobre esta situación que se vive en el día a día, “faltan los 43 estudiantes, dónde están los cuerpos de los feminicidios, todas esas tumbas blancas y mi instalación fue hecha a base de moldes de cuerpos diferentes para hacer una pantalla que me sirva para proyectar la fichas de las y los desaparecidos en Hidalgo”, expuso.
En esta exposición inigualable, su autor señala que es momento de cuestionar, de plasmar la preocupación social con arte, también, de hacer una fosa con los cuerpos de los desaparecidos “y llevarlo al hostal es manejar qué es lo público y lo privado, es poner una pregunta seria respecto a aquellas personas que nos hacen falta”, refirió.
Además de este cuarto que está libre para poderlo alquilar y vivir esta experiencia para cuestionar, reflexionar, acercarse a esta situación que se incrementa cada día en Hidalgo, el hostal cuenta con más obras dirigidas a este cuestionamiento y a lo que sucede en el país.
“Ha habido mucha aceptación y se ha rentado el espacio, por lo que estará disponible hasta el 26 de junio. Queremos que la gente se involucre en el tema viviendo de cerca la situación y no, no es una obra agresiva porque delimita bien su propio camino sin tener qué hablar de los temas sociales que, a su vez, están presentes”, concluyó.
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