Durante este año la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) federal ha llevado a cabo el embargo de cuentas bancarias a cerca de 10 empresas hidalguenses de distintos giros, informó el director de la Oficina de Defensa del Consumidor en Hidalgo, Navor Rojas Mancera.
Precisó que esto es como medida para garantizar el pago de multas impuestas por incumplimientos. Detalló que una de las acciones más recientes fue el embargo de cuentas a una gasolinera de Pachuca, derivado de la reincidencia en el impago de una sanción económica.
“Es una verificación que se hizo hace tiempo y la empresa no cumplió con el procedimiento correspondiente”, explicó.
Mencionó que el procedimiento inicia cuando se recibe una queja formal. En ese momento, la Profeco cita al representante de la empresa para buscar un acuerdo con el consumidor, si no acude, se emite una segunda notificación acompañada de una multa. En caso de persistir la negativa, se solicita el congelamiento de cuentas bancarias para asegurar el cumplimiento.
En Hidalgo, los embargos han alcanzado a negocios de distintos sectores, entre ellos una gasolinera y una empresa de quesos, apuntó el titular de la oficina federal.
“Cuando se les pide comparecer deben hacerlo, no se trata de afectar, sino de que se concilie. Una vez que pagan la multa, las cuentas se liberan”.
Además, subrayó que la intención de la Profeco no es perjudicar a los empresarios, sino hacer cumplir la ley y proteger los derechos de los consumidores. Indicó que el embargo de cuentas solo se aplica cuando una empresa ignora las convocatorias de conciliación y omite el pago de la multa dictada por la dependencia.
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