La Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGJH) inició cuatro carpetas de investigación por el presunto abuso sexual de 14 alumnos de la escuela preescolar Luis González Cosío, ubicada en la localidad de San Pedro Huaquilpan de esta demarcación hidalguense.
Así lo dieron a conocer Francisco Fernández subprocurador de género, y Lorena Cano García, fiscal de delitos sexuales y contra la familia, ambos de la PGJH, durante una reunión con los vecinos de la localidad de San Pedro efectuada en la explanada de la alcaldía de Zapotlán de Juárez.
Agregaron que en una carpeta de investigación hay 11 denuncias de posibles víctimas de abuso sexual, así como otros archivos de averiguación interpuestos de forma individual por los padres de otros tres menores.
Lorena Cano aclaró que los presuntos afectados son niños y niñas y que no podían dar detalles de algunos aspectos de las carpetas para no entorpecer las indagaciones.
La reunión se realizó luego de que el miércoles y el jueves los pobladores realizaron bloqueos en la circulación de la carretera México -Pachuca en el tramo que atraviesa Zapotlán de Juárez, en demanda de la detención de la directora del plantel Martha Rocío Espejel y de su esposo identificado como Jimmy Pichardo, a quien acusan de abusar de los niños así como de Virginia Reyes Juárez, intendente del centro escolar.
En el encuentro el cual por momentos se tornó ríspido, los pobladores acusaron al subprocurador de actuar con lentitud y de haber permitido la fuga de la directora de la escuela, su esposo y de la encargada de intendencia .
A estos señalamientos, Francisco Fernández explicó que se realizan todas las indagatorias correspondientes para determinar si hubo abuso sexual para detener y someter a proceso penal a los responsables y que no se “caiga” el caso pues debe armarse con cuidado para integrar la carpeta de investigación.
Madres de familia aseguraron que han recibido amenazas de muerte por mensajes enviados de números telefónicos desconocidos por exigir justicia para los niños.
Otras demandaron que la escuela fuera asegurada y que permanezca cerrada hasta que se esclarezca el caso. Durante la reunión, una de las vecinas dijo que una mujer sin identificar se había metido al plantel y había sacado algunas cosas para introducirla en su coche, por lo cual los pobladores le habían impedido marcharse, tras el hecho, el subprocurador se trasladó al centro escolar, donde ya había una multitud.
Los inconformes obligaron a la fémina a abrir la cajuela del auto para ver su contenido, y en el interior fue hallado un proyector de diapositivas presuntamente perteneciente a la escuela. Se desconoce quién era la mujer y quien la envió a sacar el aparato.
La institución quedó bajo resguardo de la policía estatal, mientras que agentes de investigación y peritos en criminalística se quedaron en búsqueda de indicios que puedan servir para esclarecer sí hubo o no la comisión de algún delito.
En entrevista para La Jornada, sin dar nombres de los involucrados, Luis González dijo que eran tres, y que hasta el momento había 14 presuntas víctimas, todas ellas menores de edad.
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